Ayer se realizó la primera función en el Cine Tonalá de la obra Alquimia y transmutación: mujeres presas dentro y fuera de una cárcel. Arturo Morell, titular del Instituto de Reinserción Social de la CDMX, es el autor y director del montaje. La obra se presentará todavía el próximo 23 y 30 de abril a las 18 horas.
Esta obra es un ejemplo de un proyecto exitoso de reinserción social y muestra toda la potencia del teatro como fuerza transformadora. La puesta en escena la presenta la Compañía Teatral de Personas Liberadas, integrada por 20 mujeres y 15 hombres egresados del Sistema de Justicia Penal de la Ciudad de México.
Al finalizar la función, el director del montaje agradeció al equipo de producción y a Roberto Blázquez, quien es parte del Instituto de Reinserción Social de la CDMX. Morell compartió que el proyecto inició hace más de 20 años. Durante este tiempo, explicó, ha tenido la oportunidad de conocer a más de 5 mil personas en reclusión. A través de montar El Quijote en cárceles, agregó, ha visto la transformación de muchas personas a partir de esa experiencia.
Al respecto, dijo, de ahí nació Alquimia y transmutación, de ver como muchas mujeres transformaron su vida al interpretar a Aldonza, una ramera en la el Quijote ve a Dulcinea. En muchas ocasiones, confesó, mujeres se acercan al final esas funciones para decir: “Veo más libertad en la cárcel que en mi vida, porque soy presa de temores, de una relación tóxica, de un trabajo que no quiero”. A partir de estas historias de cambio, dentro y fuera de la cárcel, es que nació esta obra, dijo.
Explicó que el montaje realiza de manera simultánea funciones en Santa Marta Acatitla. “Me hace muy feliz que están dando funciones dentro y de pronto salen libres y se integran con nosotros a la compañía”, confesó Morell. Entre estos casos está el de Karla, quien fue liberada hace apenas dos semanas y integró a la obra.
Finalmente, las y los integrantes de la compañía, compartieron a través de Yo soy, yo existo, un ejercicio de autoafirmación que forma parte de este programa, su historia de vida. Entre estas historias están la de Rocío, quien dijo, “gracias al teatro que me ayudó a reencontrarme a mí misma”. Por su parte, Hermelinda, de 66 años de edad, compartió su historia. Ella, nos dijo, pasó 13 años privada de su libertad siendo inocente, y conoció el teatro durante su reclusión. Al respecto, agregó: “Me di cuenta que con esfuerzo, disciplina y compromiso se pueden disfrutar experiencias maravillosas”.
Este proyecto tiene como finalidad generar cambios y transformación social a través del arte y la cultura. El montaje toca fibras que llevan a la reflexión y que apuntan hacia la igualdad, la libertad y la deconstrucción de conceptos preconcebidos. Se trata de una oportunidad extraordinaria para conocer y vibrar con estas historias a partir del teatro.
En los personajes de la obra alternan Sandra Martínez, Verónica Flores, Ivonne López, Rocío Carrasco, Areli Rosas, Guadalupe Fernández, Rocío Carrasco, Guadalupe Vázquez, Nieves Cruz, Karla Rodríguez, Alejandra Álvarez, Hermelinda Martínez, Cipactli Montiel y Kenia Martínez. El resto del elenco lo conforman Andrea Cárcamo, Keith Cornejo, Alma Dorantes, Ana María García, Flor Garibay, Miriam Jiménez, Hilda Martínez, Cecilia Paredes, América Silva y Nayeli Torres.
Además de Morell, el equipo creativo está integrado por Héctor Barragán, creador de la música original. Por su parte Roberto Blázaquez realiza la coordinación escénica y Sandra Martínez la coordinación de producción.
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Por Óscar Ramírez Maldonado, Fotos: Cartelera de Teatro
