Frente a los casos de mujeres en situación de vulnerabilidad, la bailarina y coreógrafa Sara Montero creó la pieza dancística, Un lugar sin fin, donde se refleja cada una de las historias de abuso que ha sufrido este sector de la sociedad, que se presenta en el Teatro de la Danza Guillermina Bravo del Centro Cultural del Bosque.
La co-directora del grupo con Antonio Soria, explicó que la obra surge de la necesidad de reflexionar, disentir y expresar la realidad cotidiana de la situación que nos contiene a todas por nuestra condición de mujer.
Al respecto, la creadora comparte: “Me afecta y me impacta el que, sin importar la condición social, económica, política, educativa, geográfica o la edad, el hecho de ser mujer significa un peligro. Si bien es un tema del que hemos hablado mucho, y parece gastado o trillado, no se acaba. No hemos logrado bajar las cifras. Es urgente seguir hablando, hacerlo visible y tangible por todos los medios posibles”.
Agrega: “El simbolismo de esta obra dentro de la historia de la compañía es la voz, el espíritu y la fuerza femenina de Proyecto IgualDesigual. Si bien el grupo se integra de un equipo mixto, el carácter femenino, el propósito de levantar la voz, defender y buscar la coherencia del discurso es algo presente en nuestro trabajo”.
La propuesta será interpretada por la compañía Proyecto IgualDesigual en el Teatro de la Danza Guillermina Bravo del CCB, este 8 y 9 de octubre con funciones a las 19:00 y 18:00 horas, respectivamente.
Con información de la Coordinación Nacional de Danza, Fotos: Héctor Lara
