Por Alegría Martínez/ Un candil en el suelo, a unos pasos de la trabajadora del hogar sentada a la mesa del comedor en penumbras, es la primera imagen que observa el público de Espíritu burlón. El ascenso del candelero con gotas de cristal, ilumina más tarde la estancia en la que tres personajes conformados por distinta materia física y espiritual, sostendrán discusiones y desencuentros gracias a la intervención de una médium.
La obra escrita en 1941 por Nöel Coward (1899-1973), actor, escritor, dramaturgo, director y compositor inglés, que ha sido vista en Londres, Madrid, Broadway y Milán, entre otros lugares, critica la vacuidad humana con sonrisa irónica.
Puesta en escena por segunda vez en México, la obra se estrena en esta ocasión bajo la dirección artística de Sebastián Sánchez Amunátegui y la dirección escénica de Juan José de Tagle, que individualmente han realizado trabajos memorables.
Odiseo Bichir encarna a Carlos, quien siente la necesidad de llamar a la médium Madame Arcati para que le ayude a enriquecer su nueva novela. El escritor, que vive una relación conflictiva con su segunda esposa, se verá acorralado entre ésta y la aparición que la oficiante de ciencias ocultas convoca a la casa de este matrimonio que no volverá a estar a solas.
La historia de fantasmas que desarrolla el reconocido autor de obras como The Vortex, Vidas privadas y Cabalgatas, entre muchas más, hace una crítica social a través de sus personajes, que envueltos en una situación aparentemente superficial, evidencian el vacío de su existencia y la ligereza con que intentan autoengañarse.
María Inés Pintado, en el papel de Ruth, la segunda mujer, exhibe la neurosis de un personaje inseguro, celoso y manipulador que busca respuestas en su esposo, quien le devuelve silencios y medias frases, confirmando así lo que ella desearía ignorar.
Por su parte, Haydeé Boetto, dramaturga, directora y actriz, desempeña en esta oportunidad el papel de Madame Arcati, a partir del que crea a una extravagante mujer con voluntad de ayudar, que entre un trago y otro se hace cómplice de un pájaro que resguarda en su rizada cabellera y se apoya en una andadera con una gran bolsa de la que extrae sus extraños instrumentos.
El asombro y la sonrisa permanente del personaje revelan el gusto por lo que la espiritista cree que su poder ha conseguido, esto gracias a la candidez y los matices que Boetto imprime a su personaje.
La aparición de quien en vida fuera llamada Elvira, primera mujer del escritor, representada por Brenda De Arrigunaga, revela en su sensual vestido rojo, la voluptuosa imagen que el escritor mantiene en su recuerdo, resquebrajado esta vez por las bajas pasiones humanas que avasallan al fantasma femenino.
Edith, la trabajadora del hogar que interpreta la actriz Gibrán Valencia, cobra importancia en la atropellada acción, a medida que ésta avanza mientras los personajes giran en órbitas distintas.
Las dos esposas son movidas por celos y ansias de dominio, el escritor ubicado entre dos polos, se interesa aún por su obra de dudosa calidad artística y la empleada es un ser indiferente, involucrado en lo que ocurre en un plano de irrealidad, sujeto a la autocompasión y el resentimiento.
La escenografía de Auda Caraza y Atenea Chávez, que alude a una casa de los años 70, propone una amplia estancia con un sofá terminado en plástico rojo, una vieja consola, una mesa de servicio con licores y un pasillo que rodea el espacio en la parte posterior con subdivisiones por donde entrarán y saldrán los personajes tanto etéreos como tangibles.
La iluminación de Xóchitl González abre espacios de luz y sombra que apoyan la presencia de las cuatro mujeres de distinta procedencia y motivación, en un espacio donde se muestra bajo la luz de un candil, lo que queda del deseo que cada uno quería alcanzar.
El texto de Coward, Espíritu burlón, abre la propuesta para pensar en la honestidad y el engaño, en el juego entre vivos y muertos, entre fantasmas, clientes y médiums, en parejas que subsisten gracias a la pugna, en la revancha, la creatividad y la huida.
La obra se presenta de viernes a domingo en el Teatro San Jerónimo, 19 de diciembre, consulta horarios, precios y descuentos, aquí.
