Por Ro Tierno/ Cortejo Producciones trae por primera vez al teatro esta pieza única del cineasta danés, con adaptación de Miguel Cane y bajo la dirección de Fernando Canek. Estará del 24 de septiembre al 10 de diciembre, todos los lunes en el Teatro Helénico.
“Hay una expectativa del público que es fan de la película que quiere ver algo del realismo norteamericano, y que está presente en la puesta. En esta búsqueda que tiene Miguel (Cane) de adaptar los narradores hacia los personajes, enriquece mucho la posibilidad de que la dramaturgia nos remite a la estructura griega del coro, que es ilustrativa, sobre lo que se está recitando vemos el evento. Acá la idea es enaltecer lo que el filme plantea, de tal manera que los conceptos se vuelvan estéticos y teatrales, es una experiencia metateatral de alguna manera, porque se emulan los conceptos estéticos fílmicos pero en un lenguaje nuevo y teatral”, expresó el director de esta puesta Fernando Canek.
Se trata de un montaje que se viene gestando hace al menos 5 años, de la mano de Miguel Cane y Eloy Hernández, y que a 15 años del estreno de la película se presenta como un homenaje a este clásico del cine, que tuvo las grandes interpretaciones de Nicole Kidman, Lauren Bacall, Chloë Sevigny y Paul Bettany.
La versión teatral, que promete y genera muchas expectativas, será interpretada por un elenco de lujo, conformado por 18 actores y actrices: Ximena Romo (en el papel de Grace), Sergio Bonilla, Claudia Ramírez, Carmen Delgado, Mercedes Olea, Luis Miguel Lombana, Pablo Perroni, Gerardo González, Rodolfo Arias, Jidith Inda, Francisco de la Reguera, Ana Kupfer, Chistopher Aguilasocho, Diego Cooper, Francisco Hernández Castelán, Mauricio Camps, Jerónimo Suárez Inda y Carlos Fernández.
Dogville es un pueblo perdido en las faldas de las montañas rocosas de los Estados Unidos. A este lugar que no figura en los mapas, llega una joven fugitiva llamada Grace, que busca refugio de un peligro que la acosa. El pueblo encabezado por Tom Edison (Sergio Bonilla) le ofrece amparo y durante dos semanas, ella consigue congraciarse con todos mediante trabajo y generosidad. Las cosas cambiarán cuando aparezca la policía y el pueblo empiece a exigirle más, llevando el abuso de poder a límites insospechados.
Sobre el personaje de Grace, la actriz Ximena Romo comentó que “es un personaje que cree genuinamente en el camino de la bondad, de la compasión, de ponerse en los zapatos de los demás, y que sin importar las condiciones todos, en el fondo, son buenos. Viene con la convicción de que si se entrega a los demás y crea un vínculo, entonces los va a poder cambiar y vivir en comunión. Dentro de esta convicción está su falla, esta creencia de que ella en su moralidad es la mas buena de todas, y ahí puede caer en la arrogancia. Eso la lleva a dejarse caer en tratos violentos, que van escalando el nivel de violencia. Mi pregunta es por qué sigue así… por una convicción en su moralidad o por una arrogancia. Es un personaje muy complejo que lo sigo descubriendo”.
La obra invita a replantearnos el comportamiento social, a ser críticos con nuestras decisiones, y en este sentido la mayoría del elenco estuvo de acuerdo en que la obra te confronta, aunque no tiene un tono aleccionador. “Todos de alguna manera somos violentados, como es violentado cualquier perro, que una vez que aprende de esa violencia ejercida empieza a desarrollar una conducta, que no sabemos hasta dónde puede llegar para poder subsistir. ¿Somos arrogantes cuando somos compasivos? ¿O podemos encontrar un ápice de compasión genuina y entender al ser humano con esa esencia animal?”, expresó Canek.
“Fernando describe Dogville como un siniestro cuento de hadas norteamericano, y es la verdad, es como un cuento de hadas, pero al mismo tiempo es una historia de terror. El proceso de adaptación tomó más de un año en realizarse, porque es muy difícil poder encontrar la palabra adecuada, hay un diálogo maravilloso entre Grace y su padre sobre la arrogancia que es una de las cosas más complejas que yo haya leído nunca”, comentó por su parte Miguel Cane, impulsor de este proyecto.
El diseño de escenografía es de Félix Arroyo y cuenta con vestuario de Giselle Sandiel y musicalización de Eliseo Santillán. Estrena este 24 de septiembre en el Teatro Helénico.
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