El teatro penitenciario es una poderosa herramienta para cambiar la vida de las personas. Pioneros en ello fue el abogado y funcionario penitenciario Juan Pablo de Tavira y el dramaturgo y actor Jorge Correa. Su legado lo podemos ver en la Compañía de Teatro Penitenciario y la Cía. Teatral de Personas Privadas de la Libertad. Son un maravilloso ejemplo del poder transformador que tiene el teatro.

La primera de ellas es un proyecto de impacto social impulsado por el Foro Shakespeare y la segunda es un proyecto del Instituto de Reinserción Social (IRS) de la Ciudad de México. Ambas compañías cuentan con una compañía interna y una externa. Es decir, cuentan con un elenco integrado de población privada de la libertad que hace teatro y ofrece funciones al interior de algún penal, y una externa, con personas liberadas que encontraron en el teatro un nuevo camino.

En cartelera podemos encontrar algunas puestas en escena a través de las cuales te puedes acercar este tipo de teatro. Se trata de propuestas con un impacto social muy importante. Todas ellas, que nos hablan de una realidad, pero también, que están cargadas de esperanza y son un grito de libertad.

La Espera. A partir del 11 de junio este montaje se presentará, los martes, en El77 Centro Cultural Autogestivo. Este espacio es la casa de la Compañía de Teatro Penitenciario externa. Se trata de una obra de teatro testimonial que nos comparte la historia – actuada por ellos mismos – de dos hombres que estuvieron internos en el Penal de Santa Martha Actatitla. Uno de ellos, permaneció 20 años interno. Es una historia que habla de violencia y cómo ésta al interior de la cárcel se profundiza, pero también nos habla de cómo estos hombres encontraron ahí al teatro y al salir han dedicado su vida a él.

Alquimia y Transmutación: mujeres presas dentro y fuera de una cárcel. Este montaje de la Cía. Teatral de Personas Liberadas acaba de tener una temporada en la Casa Fuerte del Indio Fernández. Es un montaje que se ha presentado en distintos foros y vale la pena estar atentos a sus nuevas temporadas. Se trata de una obra hecha con valor, corazón y entrega. Nos habla de la experiencia de estas mujeres. Nos habla sobre los obstáculos que han tenido que enfrentar al interior y afuera de la cárcel, pero también nos habla de su fuerza y su capacidad de transformarse a través del arte.

MCBTH Ruega por nosotrxs. Finalmente les platicamos de este montaje que es toda una experiencia. La obra es presentada por la Compañía de Teatro Penitenciario interna, reforzada por dos integrantes de la compañía externa. Lo distinto de este montaje es que el público – previo registro y trámite que realiza El77 Centro Cultural Autogestivo – es llevado a la Penitenciaria de Santa Martha Acatitla para ver esta adaptación de la “obra maldita” de William Shakespeare. En este mes de junio tienen confirmadas todavía dos funciones, el 22 y el 29. Se trata de una oportunidad de vivir esta experiencia que transforma a público e internos en el lugar donde nace esta compañía, tras los muros de Santa Martha, precisamente en el teatro de la institución, que lleva el nombre de Juan Pablo de Tavira.

 

Por Óscar Ramírez Maldonado, Fotos: Cortesía El77 Centro Cultural Autogestivo.

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