El pasado mes de enero se cumplieron 85 años del nacimiento del Teatro Ulises, fundado en 1928 por un grupo de dramaturgos y poetas. Para conmemorar el surgimiento de este proyecto en el que participaron artistas de la talla de Salvador Novo, Xavier Villaurrutia, Carlos Pellicer, Gilberto Owen, Celestino Gorstiza, Bernardo Ortiz de Montellano, Julio Jiménez Rueda, Isabela Corona, entre muchos otros, el día martes 9 de abril el Instituto Nacional de Bellas Artes realizó un evento en el que participaron Néstor López Aldeco, Carmen Galindo, Paloma Gorostiza, Alejandro Ortiz Bullé y Luis Mario Moncada.
El núcleo de este grupo dedicado a las artes escénicas más tarde crearía grupo de Los contemporáneos, que dejaron una basta producción literaria, teatral, poética y ensayística. Teatro Ulises se fundó en el corazón de la Ciudad de México, en la calle de Mesones 42, y en él se montaron obras de dramaturgos extranjeros que eran traducidas y dirigidas por los miembros del propio grupo.
Al respecto, la catedrática y periodista Carmen Galindo ha señalado que aunque los miembros de este grupo son “más conocidos como poetas, se debe recordar su importante labor teatral, pues este es un elemento fundamental en sus carreras. En el caso de Salvador Novo, por ejemplo, marcó el inicio de una abundante producción de obras teatrales que se extendió en su calidad de jefe del departamento de Teatro del INBA y posteriormente en La Capilla”.
Entre los autores que retomaron los integrantes del Teatro Ulises estuvieron Jean Cocteau, Eugen O´Neill, Roger Marx, Charles Vildrac, Lord Dunsany y H.L. Lenormand, entre muchos otros. Uno de los objetivos de este tatro, ha señalado el crítico e historiador mexicano José Luis Martínez, estuvo la difusión de la vanguardia teatral del mundo en nuestro país. Hay que recordar, que en aquella época la escena era dominada por el teatro nacionalista.
Dentro de este grupo, señala Galindo, Antonieta Rivas Mercado jugó un papel destacado, pues “ gracias al financiamiento que brindó, durante el breve tiempo que duró el proyecto, se llevaron a cabo diversas puestas en escena”.
Durante un evento realizado en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, se recordó el día de ayer a este espacio de vanguardia y experimentación teatral que durante 1928, a pesar de su efímera duración de apenas 8 meses, realizó una importante aportación al desarrollo e impulso de las artes escénicas en nuestro país.
