Llega diciembre y con él, un clásico que no pasa de moda: las pastorelas. ¿Qué tienen estos relatos que año con año nos atrapan? Es esa mezcla de risas, tradiciones y villancicos que nos conecta con la magia navideña.
Si aún no estás convencido de que las pastorelas son el plan perfecto para esta temporada, aquí te damos tres razones para correr al teatro:
1. Tradición con un toque de humor: Las pastorelas son el mejor ejemplo de cómo combinar una historia clásica con chistes que te harán reír sin parar. Entre ángeles despistados y demonios con ingenio, cada función ofrece una experiencia única que mezcla lo divino con lo terrenal.
2. Ideal para toda la familia: ¿Quieres un plan donde los niños se diviertan, los abuelos sonrían y tú olvides el estrés del tráfico navideño? Las pastorelas tienen un encanto universal. Son un espacio donde todas las generaciones disfrutan y hasta puedes sacar tus mejores coros para cantar “Noche de Paz”.
3. Conectar con nuestras raíces: En cada pastorela vive la esencia de nuestras tradiciones. Desde diálogos que usan palabras tan mexicanas como el “¿qué pachuca por Toluca?”, hasta los villancicos que nos hacen sentir en casa. Es un recordatorio de que la Navidad no solo se celebra, se vive.
Este diciembre, regálate una noche de risas, música y espíritu navideño con las diferentes opciones que tenemos en cartelera, cada una de ella, está dispuestas a recordarte que en cada sonrisa compartida hay un pedacito de Navidad.
Si quieres conocer la variedad de opciones de nuestra cartelera da clic, aquí.
Por Itaí Cruz
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