Por Luis Santillán/ Una actriz, aparentemente en una entrevista, comparte su postura sobre el ámbito en el que se desarrolla que es la industria pornográfica, exalta los beneficios que tiene e invita a mirar desde otra perspectiva el entretenimiento sexual. Todo parece ir bien hasta que un accidente la lleva a reflexionar en voz alta sobre quién es, cómo llegó ahí y qué desea en su porvenir.
Esa es la línea que desarrolla la obra La exhibicionista, escrita y dirigida por Salvador Garcini. La producción es de la Compañía Teatro en el Aire, quien quiere distinguirse por la combinación de cine y teatro.
En esta propuesta se valen del video para mostrar la travesía por carretera en la que se sugiere el accidente, una secuencia donde se ve a la actriz llegar al Foro Shakespeare -recinto donde ocurre la temporada-, y para mostrar otros escenarios. Toda la parte del teatro queda en Gabriela Rosero quien interpreta a María de los Ángeles.
Es loable el esfuerzo titánico de Rosero por mantener a flote al personaje. Éste deambula por una serie de segmentos que permiten informarle al espectador cómo es la relación con su familia, la frustración que le causó perder un papel de una obra, la dinámica que tiene con su terapeuta, los estragos ante el distanciamiento con el padre, y otros más.
Rosero se enlaza con los momentos por los que atraviesa el personaje, proyecta fuerza cuando abarca el tema de la sexualidad, vuelve latente las fracturas emotivas en los pasajes de vulnerabilidad, y hacia la parte final, expone su capacidad actoral al asumir el rol de Juana de Arco, manteniendo cautiva la atención del espectador.
Momentos como en el que filma un segmento de su profesión o la dinámica de presentación de la motocicleta, muestran a una actriz con dominio del ritmo, aquel que la lleva a una crisis anímica permiten ver las variantes emotivas que puede alcanzar. El jugar a ser dos personajes le da la oportunidad de apreciar lo versátil que puede ser su rango actoral. La conversación que tiene con el director que realiza el casting exhibe la confianza que le tiene al director real de la puesta en escena.
La exhibicionista explora la vida de una actriz que, sin razones de gran peso, casi reniega de su decisión por profesionalizarse en el negocio fílmico triple x, y en el proceso permite ver a Gabriela Rosero sostener la propuesta, mientras seduce al publico que le muestra su aprecio mediante el aplauso al final de la obra.
La obra se presenta los lunes y miércoles en el Foro Shakespeare, consulta horarios, precios y descuentos, aquí.
