Como mexicanos vivimos las tradiciones que rinden tributo a los que ya no se encuentran presentes de manera excepcional y auténtica, nuestros ritos han cruzado fronteras y son admirados en diferentes latitudes alrededor del globo por su originalidad y sincretismo.
Muestra de la magia y el misterio de esta época son sus mitos y leyendas, transmitidas de generación en generación como un bálsamo que permite renacer del dolor e incentiva las creencias que desde tiempos prehispánicos buscaban ofrecer respuestas a nuestros contextos y luchas, ofreciendo tributo a los que se adelantaron en el proceso mediante la esperanza que ofrece el mundo de lo paranormal y así volver a vernos.
En este sentido, la puesta en escena La llorona de Mauricio Pichardo, bajo la dirección de Rafael Perrín, ofrece una mirada a nuestro pasado mediante el misticismo de nuestros paisajes naturales a través del orgullo de nuestras raíces.
Por ser una obra perfecta para reconocernos como mexicanos, a continuación te presentamos 3 razones para ver La Llorona en Xochimilco.
1- El formato. Por medio de un estilo en en teatro musical, el espectáculo multidisciplinario reúne baile, música, canto y un sin fin de dinamismo pertinente para ser disfrutado por todos los integrantes de la familia, quienes serán gratamente sorprendidos por la iluminación y diversos elementos de producción que permiten un entretenimiento de calidad y mucha emoción.
2- La leyenda. Todos hemos oído hablar sobre el enigma que engloba la historia alrededor de La Llorona, muchas son las versiones de este extraordinario personaje a lo largo de nuestro país y del continente latinoamericano también. Sin embargo, en esta ocasión serás testigo de una interpretación que busca recordar y reflexionar un momento histórico en la construcción de México, conmemorando los 500 años de la invasión española mediante un formato que invita a la imaginación, el amor por las raíces y la valentía.
3- El trayecto. El concepto comienza desde el momento en que el público asistente zarpa del Embarcadero Cuemanco hacía la oscuridad total, contemplando el silencio de siglos atrás, del que inevitablemente se hace parte, bajo una luna prehispánica que se dibuja sobre el movimiento tranquilo y constante del agua por el cual las trajineras transitan en un diálogo místico que transporta a un escenario construido en el corazón de la enigmática laguna Tlílac.
Por estas y más razones, en Cartelera de Teatro te garantizamos un espectáculo original y de vanguardia, la oportunidad perfecta para incentivar la imaginación de los más pequeños y la ocasión adecuada para transitar por uno de los escenarios naturales más emblemáticos de nuestro país, bajo las reflexiones que propicia la oscuridad de la noche, para mayor información consulta, aquí.
Por Ulises Sánchez, Fotos Cartelera de Teatro
