Por Arantxa Castillo, Fotos: Cortesía/Hablar de maternidad es también hablar de mujeres y abordar el rol de género. Entender que prejuicios como aquel que sostiene que la maternidad es la autorrealización de la mujer o el deseo de todas las mujeres, se han mantenido como un mandato colectivo que obliga a cada mujer a cuestionarse este rol.

Sin duda, es una decisión personal que va más allá del deseo y que lleva algunas profesionales del teatro como la directora y actriz, Pilar Boliver, la productora Jimena Saltiel y la actriz Teté Espinoza a reflexionar sobre la maternidad, pero a partir de sus propias vivencias, que amablemente compartieron a Cartelera de Teatro.

“Sientes que tu vida va dejar de ser tu vida y en parte sí, pero descubrí que yo podía seguir haciendo teatro y poder vivir en este ambiente”, Teté Espinoza (Actriz)

“Tener un hijo me ha dado mucho más valor para hacer cosas que, antes, quizá no me hubiera atrevido a hacer. En mi caso cuando tuve a mi primer hijo a los 26 años, estaba en shock. Pensé que iba a dejar de hacer teatro, yo sentía que iba tener que trabajar como secretaria en una oficina como Godínez, y ése era mi mayor miedo. Padecí mucho los primeros meses, porque además era madre primeriza, sientes que tu vida va dejar de ser tu vida y en parte sí, pero descubrí que yo podía seguir haciendo teatro y poder vivir en este ambiente. Recuerdo que vivía en Xalapa, Veracruz, y aprendí a decir que no, porque ya tenía una boca que alimentar”.

“Admiro y respeto a las mujeres que deciden no ser madres, lo entiendo y también aplaudo a quienes, como yo, deciden ser mamás y seguir cumpliendo sus sueños. He aprendido a priorizar todo en mi vida y en este segundo embarazo me he sentido súper cobijada por mi pareja y mis colegas”.

“Desde muy chiquita decidí que quería experimentar mi vida y desarrollar mi carrera sin ser mamá. Mis obras son mis hijos”, Pilar Boliver (Directora y actriz)

“Yo vengo de una mamá de los años sesenta donde hubo un movimiento feminista, ella tuvo cinco ‘chilpayates’. Mi padre era un artista, pero también estuvo un poco ausente en la crianza. Lo que yo heredé de mi mamá es que tener hijos implicaba salir a trabajar, pero por tus hijos y dejar un poco tu vida personal y tu parte creativa. Yo heredo esta sensación de no gracias, no quiero tener hijos, yo quiero tener obras de teatro”.

“Desde muy chiquita decidí que quería experimentar mi vida y desarrollar mi carrera sin ser mamá, pero no como un dolor, o por no poder, porque tuve parejas con las que pude hacerlo, pero fue una decisión muy consciente y muy pensada, porque no era lo que yo quería. Eso del reloj biológico no lo sentí nunca y aunque había un prejuicio de que si no eras mamá no eras una mujer completa, por fortuna en mi ambiente familiar siempre se me respetó mucho por mi decisión”.

“Antes de ser mamá ya me sentía realizada, y hoy siendo madre me sigo sintiendo igual de realizada”, Jimena Saltiel (Productora)

“Hay una imagen de mamás 100% felices y otras 100% infelices. Creo que la maternidad es dura, pero a la vez muy gratificante, porque amas a tus hijos como a nada en el mundo. Para mí fue una decisión que me tardé mucho en tomar, porque las mujeres del teatro no tenemos la idea de que la mujer no cumple su rol si no es madre, sino que puede tomar la decisión consciente. Tenemos una gran ventaja, y yo la viví como una elección. Antes de ser mamá ya me sentía realizada y, hoy siendo madre, me sigo sintiendo igual de realizada”.

“En cuanto a mamá trabajadora, todas las madres trabajadoras no vemos divididas entre el trabajo y entre nuestros hijos, porque quienes hacemos teatro es algo que nos llena. No podríamos dejar de hacerlo. Entiendo que no puedo estar al cien en ambos lados y que no hay mamá perfecta y que a veces voy a elegir no acostar a mi hija para ir a un estreno o al revés, o hacer menos proyectos para estar más con ella”.

Estas mujeres nos abren un panorama de diferentes visiones e historias en las cuales dejan claro que la maternidad es una decisión personal, que no es mejor ni peor que no serlo. Tampoco implica la renuncia a tus sueños, pues cada una transita por esta decisión y este proceso a su manera, desafiando los prejuicios y tabús que envuelven a la maternidad.

No dejes de recibir en tu correo, Facebook o Twitter toda la información y los estrenos de las obras de teatro de la Ciudad de México.