Por Arantxa Castillo, Fotos: Cortesía Cenart/ “Son muy pocos los elementos en los que me apoyo para contar una historia” dice Abril Mayett, directora, actriz y dramaturga que durante mayo presenta cinco obras bajo su dirección en el Ciclo Carrusel Teatral que reconoce la labor de directores mexicanos, experiencia que le permite a Mayett volver a su alma máter en el Centro Nacional de las Artes (Cenart).

“Es una de las mejores de mi vida a nivel profesional, porque yo estudié en la Escuela Nacional de Arte Teatral, el Cenart, es mi alma máter, para mí es un placer volver de esta forma con un reconocimiento y con la oportunidad de presentar mi trabajo, cada día con una obra distinta lo cual me emociona mucho la gente ha aplaudido mucho los montajes, nos conmueve mucho”, comentó.

 

Abril Mayett con su productora Shake & Falstaff realizó la selección de los cinco montajes más exitosos de su compañía, MH espectáculo clown, El Rey John, El caballero Olmedo, El Rufián Dichoso, La verdura carnívora fueron las obras elegidas.

La también dramaturga nos presenta en este ciclo propuestas completamente distintas que van desde la reinterpretación de autores como Shakespeare, Lope de Vega, Miguel de Cervantes y de temas basados en el contexto contemporáneo como la violencia que sufren los niños de la calle.

En entrevista para Cartelera de Teatro, Mayett confesó la importancia de hacer obras divertidas que se apoyen en una importante labor actoral y calificó su trabajo en escena como una propuesta “minimalista”.

“Me gusta mucho que las obras no se parecen entre sí, tienen diferentes tonos, plásticas muy distintas. A pesar de que las dirige una misma persona, no se parecen mucho, quizá el concepto que las une a todas, es que todas las puestas son muy divertidas. Me esfuerzo mucho en que lo sean, para mí es muy importante que no sea un teatro aburrido o poco accesible para el público, que la experiencia del espectador sea de gozo eso no está peleado con ningún género”, comentó.

Abundó en la preparación del actor: “Otra cosa es que me concentro mucho en el talento del actor, por eso la mayoría de mis montajes son minimalistas. No hay grandes elementos de escenografía, el actor en el espacio es el que crea a los personajes y a las situaciones; se puede ver al actor muy exigido porque tiene que llenar el espacio y llenar la acción. Estamos acostumbrados a ver teatro clásico con un plástica y escenografía tan grande que a veces se comía al actor”, dijo la directora que ofrecerá su última semana de funciones en el Foro de las Artes del Cenart.

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