Por Ro Tierno, Fotos:Cortesía Prensa FITLÂ/ En su 4ta edición, el FITLÂ tiene sede en Argentina y participan tres compañías mexicanas por primera vez.
Desde el año 2013, el Festival Itinerante de Teatro Latinoamericano FITLÂ, creado por el Colectivo Âmbar- Red de artistas y promotores escénicos latinoamericanos, se ha ido posicionando como uno de los encuentros más representativos del teatro colectivo en la región Latinoamericana.
Con ediciones anteriores en Costa Rica (2013), Brasil (2015) y Perú (2017), este año la sede es la Ciudad de Buenos Aires, Argentina, donde participan más de 20 compañías provenientes de Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, España, México, Perú y Argentina. El encuentro tendrá lugar del 10 al 21 de abril en distintos teatros y espacios de la ciudad porteña.
México tendrá sus representantes con la Compañía de Teatro Penitenciario (CDMX), presentando el espectáculo La espera, de Conchi León; Los Cabaret Capricho (Guadalajara) con las puestas Bonito y El folk chou; y por último el Colectivo Âmbar México llevando a escena Narices frágiles: travesía al encuentro del ser.
Si bien el festival comenzó como una iniciativa para mostrar los trabajos del Colectivo Âmbar, que reúne artistas de varios países de Latinoamérica, fue creciendo y ampliando su visión hasta lo que es actualmente: un encuentro de compañías teatrales que con su trabajo apuestan a una transformación social desde el arte. “En esta edición, casi el 40% de las actividades son gratuitas, en barrios y escuelas. Se trata de llevar el teatro a la gente, no esperar solo los que vienen al teatro, sino llegar a mayor población, y tomar al arte como una herramienta de transformación social”, expresó el director del FITLÂ Gonzalo Alfonsín en entrevista para Cartelera de Teatro.
Hablar de Teatro Latinoamericano es hablar de un teatro con ciertas características, que van más allá de lo geográfico. Aunque el director del FITLÂ aclara que no pretende ‘encasillar’, sí manifestó que la curaduría de los grupos que participan está hecha desde un criterio social y colectivo del quehacer, algo que es muy común de los teatreros latinoamericanos.
“Hay muchas formas de teatro, hay lenguajes distintos, lo que sí rescatamos (dentro de esta imposibilidad de encasillar) es la creación colectiva, la dramaturgia del actor y el teatro de grupo, nos formamos con maestros del teatro latinoamericano que están dentro de esta categoría, como Teatro La Candelaria, Teatro Andino, Baldío Teatro. Los curadores tenían en cuenta que las obras fueran creación colectiva o de dramaturgia del actor, lo que significa que no sea un trabajo escrito previamente, sino de experimentación, donde el texto se va escribiendo con el trabajo de los actores. Los elencos se conforman por proyecto y es raro ver que duren más de dos años, entonces tenemos en cuenta eso, a los grupos que tienen muchos años, no son un espectáculo, sino que hace tiempo que trabajan así”, comentó Alfonsín.
El FITLÂ es un festival autogestionado por los artistas de la red y los invitados. Aunque cuentan con un mínimo apoyo de organismos públicos y privados, el trabajo es resultado del esfuerzo de sus realizadores, y la mayoría de las funciones son gratuitas. Esta edición, según comentó su director, es la más grande en programación realizada hasta ahora, con espectáculos, talleres, y charlas impartidas por los mismos artistas. La inauguración contó con la presencia del crítico e historiador Jorge Dubatti y el dramaturgo argentino radicado en Ecuador Arístides Vargas.
“Como siempre pasa con una obra o un taller, despierta cierto agradecimiento, pero en espacios donde no suelen llegar estas ofertas se genera algo mayor. En los talleres por ejemplo, se dan cuenta que los artistas no son seres especiales tocados con la varita mágica, sino que todos tenemos que improvisar para ser artistas de lo que sea, y es una herramienta de transformación muy fuerte. Más allá de eso, un festival lo que genera es un encuentro entre distintas culturas, donde el intercambio es más fuerte, y se da esta cuestión de comunión y comunidad”, expresó el representante del FITLÂ.
Gonzalo, ¿por qué te parece importante que la gente se acerque al Festival?
Por un lado para que dejemos las redes y nos conectemos con esto que tiene el teatro, que es el vivo, todas las funciones son distintas, el actor está ahí en carne y hueso, muy cerca, lo podes oler, esa experiencia es muy linda, aunque la obra sea trágica. Si ya les interesa el teatro, entonces pedirles que apoyen el festival para nosotros poder brindar a los artistas mejores condiciones, para eso necesitamos el apoyo de todos y de todas.
Gonzalo Alfonsín adelantó que hay posibilidades de que la próxima edición (2021) sea en México o en Colombia: “Este año se sumaron tres grupos mexicanos que no estaban antes, entonces creo que va a ser algo importante y va a dar qué hablar”, concluyó.
Para conocer más del Colectivo Âmbar y la programación del FITLÂ pueden ingresar a https://www.festivalfitla.com/
