Fotos: Estudio Alós & Ponce
Por Saúl Campos/Mariano Ruiz es un actor de teatro, cabaret, televisión… multifacético pues. Sin embargo, a pesar de poder contar con una carrera que muchos quisieran, son los personajes que no ha podido interpretar, aquellos que lo llevan a crear este show, para poderlos interpretar sin la limitante que el mundo real tiene: son roles para mujeres y él es hombre. Seleccionando a sus favoritas chicas Shakespearianas, apoyado por sus divas del pop actual favoritas, Mariano buscará desmitificar los roles de género en un tour de force… o quizás un tour musical.
La Teatrería presenta una creación de Mariano Ruiz: The Shakespearean Tour, un show de cabaret creado desde el punto más honesto y cercano de su autor, para luchar contra el estigma de los roles de género entre los seres humanos, poniendo en tela de juicio y comprobando que la feminidad no está peleada con el sexo masculino, al contrario, se complementa perfectamente.
En esta aventura, Mariano nos muestra un recorrido por las grandes mujeres Shakespearianas, que en el periodo Isabelino que vieron la luz, eran siempre interpretadas en su totalidad por hombres. Sin embargo, a medida que el tiempo pasó, se volvieron una exclusiva de las mujeres, ya que “Un hombre no puede ser femenino”, es ahí donde el oficio de la actuación viene a salvarnos y luchar contra estos falsos esquemas.
Ruiz explora una cotidianidad abrumante, donde está cuasi penado expresar feminidad si se es hombre por naturaleza. Demandando equidad desde una trinchera pop, en la cual Taylor Swift llega al escenario para interpretar Sueño de Una Noche de Verano, contada desde una contemporaneidad en la cual el personaje es en realidad una bloguera y cerrando la historia con un hit de la cantante, parafraseado con el contenido de su personaje Shakespeariano.
Es justo esta cuestión la que vuelve tan fascinante este trabajo, si bien ya conocemos todas las historias que nos va a contar, Mariano explota su creatividad y cultura pop para hacer más fresco cada relato y arrancar carcajadas a su público. Sin duda, es un trabajo pensado y dirigido a un público más millenial que pueda entender referentes a Beyoncé o Wicked con agilidad y que encuentre en los gags la gracia que vuelve potente a esta farsa.
Si bien la limitante del tono para todo el público existe, este es un trabajo verdadermente fuera de serie y totalmente disfrutable. La idea de mezclar un tour musical de cualquier superestrella de la música pop norteamericana, en conjunto a las grandes mujeres escritas por Shakespeare para alzar un mensaje sobre la importancia de la libertad de género es sencillamente brillante, necesaria y ante todo: franca.
The Shakespearean Tour es una puesta hecha desde la confianza, del talento y la honestidad, sin pretensiones de ningún tipo, es la obra perfecta para todo aquel que ha dado su mejor concierto en la regadera para su audiencia invisible, y para todos quienes siempre han soñado ser algo o alguien que ante la sociedad no es políticamente correcto, para alentarlos a ir tras esa meta, sin importar las etiquetas impuestas.
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