Arantxa Castillo y Fotos Agencia Viogg/ Kika Edgar fue la actriz que inauguró la cuarta temporada de la obra experimental Conejo Blanco, conejo rojo, del dramaturgo iraní Nassim Soleimanpour, la noche de ayer en el Foro Lenin ubicado en la colonia Roma.
Desde el momento que Kika subió al escenario y se le entregó el sobre amarillo que contenía el guion de la obra, el público se mantuvo cautivo ante cada movimiento y diálogo que interpretaba la actriz y cantante en el escenario, donde solo había una mesa con dos vasos de agua, una escalera, y una silla.
Respecto a su experiencia en esta obra, en la cual participarán también Tessa Ia, Sergio Zurita, Mauricio Mancera, Benny Ibarrra, Luis Félipe Tovar, María León y Paulina Goto, Kika aseguró que: “Enfrentarse a un escenario con un texto desconocido, es un gran ejercicio, es la oportunidad de saber que tanta tabla tienes en el escenario; eso me gusta, me hace sentir que puedo regresar a mis orígenes. Me siento impresionada por lo que puede hacer un texto y sobre todo una primer lectura, el público se divirtió y estuvo atento a lo que el autor quiso decir”, comentó.
La actriz destacó que su forma de prepararse para este desafío fue mantener la tranquilidad: “Traté de estar lo más calmada posible, porque sabía que era algo desconocido y entre más tranquila estuviera, sería más fácil digerir lo que venía en el texto”.
Conejo blanco, conejo rojo fue escrita cuando Nassim Soleimanpour, por una orden judicial no podía salir de su país de origen por haberse negado a realizar el servicio militar obligatorio, ha sido representada más de 1000 veces en 25 idiomas y en México cuenta con la producción de La Teatrería en alianza con Playhouse Entertainment y La Butikq.
“El autor tiene muchas cosas que decir, el vivir dentro de una jaula como lo es su propio país, nos deja un mensaje claro de lo que él quiere decir, él nos habla del sentido, de lo que venimos a hacer a este mundo todos y cada uno de nosotros”, comentó Kika sobre el trabajo de Nassim.
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