Por Ro Tierno, Fotos interiores Cortesía Producción/ El texto de la escritora estadounidense Megan Hart, será interpretado por Juan Carlos Colombo, Ana Isabel Esqueira, Pedro de Tavira, y Mariana Fernández. A partir del 3 de septiembre en el Teatro Milán.

Producida por Andrea Salmerón Sanginés, Teatro en Fuga y Zamora Films, con apoyo de EFIARTES, y traducida al español por Paulina Barros Reyes Retana, Esto es una ficción es una comedia que atraviesa un tema universal y muy transitado: las complejidades de una familia disfuncional. Idea de Mariana Fernández, la puesta está dirigida por José Caballero.

“Es una obra que tiene lo necesario para ser vista por el público de cualquier latitud, que trata un tema cercano, especialmente a todos aquellos que nos dedicamos de una u otra manera a crear una ficción. Ha sido un proceso interesante, breve, y estamos muy contentos”, comentó Caballero sobre el montaje.

Desde una perspectiva original, la obra se centra en el personaje de Emi Benson, una escritora que pretende publicar su primera novela, que aparentemente abarca un tema biográfico y personal: la historia y secretos de su propia familia. Este será el disparador para el desarrollo de una trama que primero pretende divertir al público, para luego hacerlo reflexionar sobre la institución familiar, y que probablemente se sentirá identificado en algunos de los aspectos y personajes de esta historia.

“Cuando la vi en Nueva York, tuve la oportunidad de ver en un teatro chiquito esta obra que trata de una familia, y me conmovió muchísimo. Cuando vine a vivir a México, se me quedó la obra y pensé que era una historia que se podía contar en Estados Unidos, en México, porque es universal. Por suerte José Caballero dijo que sí al proyecto, y creo que encontramos el mejor elenco”, expresó Mariana Fernández, quien además interpreta a Celia, la hermana de Emi (Ana Isabel Esqueira).

“Hay un elemento interesante, esta cuestión de que la hija ha escrito una novela, y la discusión es que ella sostiene que es ficción, y los otros dicen que no es ficción, sino que es su vida. Lo más chistoso es que nadie la ha leído, solo ella. Entonces esta relación entre ficción y realidad creo que es novedosa y el atractivo”, señaló Juan Carlos Colombo, que encarna al personaje del padre, David, un hombre que como expresó el actor “no ha tomado decisiones fuertes en su vida y educó las hijas de formas diferentes”.

Pedro De Tavira ingresa en la obra como el personaje de Teo, una persona ajena a la familia, que se involucra afectivamente con Emi en un encuentro inesperado. “A él le toca vivir la parte donde Emi le dice a la familia que escribió esa novela y la va a publicar, es el trampolín para que ese momento suceda”, expresó el actor.

Esto es una ficción, pareciera sumergirnos en esos recovecos oscuros que existen en las familias reales, donde los secretos, las posiciones, y la apariencia, siempre juegan un papel importante a la hora de relacionarse, bajo este ideal falso que la publicidad y el cine ha sabido inculcarnos de la familia perfecta. De ello depende el carácter que forjan los hijos y las hijas, sus miedos, inseguridades, objetivos en la vida, etc. No por nada es un tema tan utilizado en la ficción, genera empatía, y en este caso nos lleva a una reflexión desde el humor, y con el complemento de mostrarnos un personaje como Emi que se atreve a empujar los muros de su propia familia para cumplir con su objetivo profesional.

“Creo que el miedo es algo que está presente en la obra, el miedo a ser tú mismo, tomar las riendas de tu vida, en todos los aspectos, vocacional, amoroso, y el personaje transita por esa parte en la obra”, comentó Ana Isabel Esqueira.

Juan Carlos Colombo también comentó que “la familia como institución siempre ha estado en decadencia. Nadie respeta a su familia porque las familias no son respetables. Es un núcleo que se plantea como una sociedad porque necesita que sea de esa manera. Todas las familias se terminan escogiendo, no hay prototipo de familia, lo que hay son prototipos de ficción, ellos crean la familia perfecta, pero no existe”.

José Caballero por su parte añadió que “hay una crítica implícita a la institución familiar o a un aspecto de la institución familiar, lo que se calla, lo que no se dice, lo que se miente, con tal de mantener cierto tiempo de cohesión. Este es un punto que resulta crítico. La obra lo que nos plantea es el valor de la verdad, lo que se siente, lo que se ve, lo que se piensa, la importancia que esto tiene para salir adelante. Esto es lo que decide uno de los personajes de la obra, seguir su camino. Es curiosa la acotación de la autora hacia el final, dice que estos dos personajes salen en una nueva dirección… yo como director no sabía si quería decir que tenía que salir para el otro lado (risas), pero en realidad no es algo que deba verse físicamente, sino que es algo que debemos saber nosotros, los que estamos ayudando a dimensionar la ficción en la escena, los que sabemos que estos personajes mentalmente terminan yendo en otra dirección, esto es un mensaje que debe llegar al espectador”.

Esto es una ficción es sin dudas una puesta que ya por su elenco, equipo creativo, y la dramaturgia, anticipa una buena experiencia para el público que además de reírse, saldrá aceptando que ninguna familia es perfecta, y eso está muy bien.

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