Por Ro Tierno, Fotos Cortesía Cenart/ En este primer encuentro, se presentarán las obras Tandas y Tundas, Angelique, y Yo soy el Rey del Mambo, del 17 de agosto al 2 de septiembre en el Teatro Raúl Flores Canelo.
En presencia del director Arturo Beristain, el escenógrafo Israel Rodríguez, el director Eduardo Castañeda, y Alejandra Páramo representando al Cenart, se dio inicio a la presentación de este primer Ciclo dedicado al género del Cabaret, tan representativo de México.
“En momentos como los que estamos viviendo, donde hay un resurgimiento de los supremacistas blancos, con un payaso en la Casa Blanca, diciendo que los mexicanos somos lo que somos, la reafirmación de la identidad mexicana con el orgullo de lo que somos, es fundamental e importantísima, también como un dique al colonialismo cultural norteamericano. Tenemos muchas cosas que decir que son nuestras, que son importantes y que son profundas y serias, y muy divertidas. Recuperar un género como éste, para nosotros forma parte de un orgullo por lo mexicano”, comentó Arturo Beristain, directror de Tandas y Tundas, obra galardonada como Mejor Obra de Teatro de Revista por la Agrupación de Críticos y Periodistas de Teatro ACPT y por la Agrupación de Periodistas Teatrales APT.
“Nosotros hacemos teatro de Revista, un género prácticamente extinto en nuestro país, quizá las últimas puestas en escenas como tales las hizo Enrique Alonso ‘Cachirulo’, que fue el heredero de María Conesa. Hay mucha historia escrita del género, pero ya no sabemos cómo se hacía, está escrito, sabemos todos los elementos, por ejemplo que no se usaban escenografías, sino decorados, telones pintados de papel, de tela. Hay una anécdota de que Diego Rivera en tiempos difíciles, después de su regreso de París, pintó telones para el teatro de revista que no firmó, pero que pintaba para sobrevivir. Un oficio en extinción”, comentó Beristain sobre el llamado ‘género chico’ del teatro.
En esta obra, que se presentará los días 17, 18 y 19 de agosto, participan tres músicos en vivo y diez actores en escena que, siguiendo la tradición de la Revista Mexicana, presenta la historia de la familia Cortés, dueña de un teatro en la Ciudad de México, en pleno Porfiriato. Ofrecen un recorrido a través de la música: arias de ópera, zarzuelas, cuplés y valses, influencias francesas, españolas y cubanas, hasta llegar al teatro de revista popular y arrabalero, sin pasar por alto los cuadros cómicos, noticias de la época, y la represión hacia el pueblo. Tandas sobre el escenario y Tundas fuera de él.
Por su parte, el dramaturgo y director de Angelique, Eduardo Castañeda, expresó que “los tres espectáculos tienen algo que los unifica, y es la época. Angelique es una mulata francesa que llega a México, después de desprenderse del staff de Edith Piaf en su gira por Estados Unidos, llega aquí y es políglata, va por los bares cantando, tiene una idea de este México exótico como europea, y viene buscando a Cantinflas, está enamorada de él”.
La obra de Castañeda es interpretada por la actriz y cantante Muriel Ricard, en una puesta que sucede entre canciones, tejiendo una comedia que transita entre la pieza, el café concert y el cabaret, para hacernos vivir una experiencia onírica y voluptuosa. Profundiza sobre temas de la cultura mexicana y el racismo hacia la gente de piel negra, tercera raíz presente en esta tierra.
“La recuperación de la memoria, de tradiciones mexicanas, de décadas anteriores, es como el eje, la columna vertebral de estos tres proyectos. En el caso del Rey del Mambo, su origen está en la conmemoración del centenario del natalicio de Dámaso Pérez Prado”, comentó Israel Rodríguez, escenógrafo y parte de Conjuro Teatro, que presenta la tercera propuesta de este ciclo: Yo soy el Rey del Mambo.
La obra de origen cubano, hace tres meses que está realizando su gira por México, lugar donde Pérez Prado (cubano nacionalizado mexicano y pionero en el género del Mambo), realizó la mayoría de su carrera, formando parte del circuito cultural mexicano e incluso influyéndolo.
La puesta nació de un encuentro “fortuito” de Conjuro Teatro con Ulises Rodríguez Febles en Cuba, en el momento en que su ser entero respiraba Pérez Prado, pues llevaba ya un tiempo desarrollando una investigación sobre esta controversial figura y sobre la verdadera fecha de su nacimiento. Entonces, la magia que acompaña a los proyectos entrañables se hizo presente, la relación interminable y fraterna que siempre ha existido entre los pueblos de Cuba y México provocó este espectáculo que rinde homenaje a un ser creativo, con la locura y osadía de los grandes artistas, esos que son capaces de hacer a los otros, por un momento al menos, tan libres como ellos, capaces de disolver fronteras y prejuicios.
Sobre esta iniciativa del Cenart, Alejandra Páramo comentó que “ya tuvimos anteriormente producciones de cabaret y tuvieron muy buena aceptación en el público. Por otro lado, surge la necesidad de recuperar tradiciones cómicas, como parte de la tradición mexicana. Al mismo tiempo, Tiempos de Cabaret es una evocación de tiempos anteriores, de cuando surge este género, y donde en las carpas surgieron personalidades que luego fueron al cine, o artistas de gran renombre. Es una invitación a ver la realidad social y política desde este género teatral.”
Las funciones del ciclo Tiempos de Cabaret se llevarán a cabo en el Teatro Raúl Flores Canelo, en horario de vienes a las 20:00 h, sábados 19:00 h y domingos 18:00 h.
