SÍGUENOS EN:


El miedo como mediador de rutinas y alegrías: La ciénega de las garzas



La ciénega 1Por Roberto Sosa/ La ciénega de las garzas es el hábitat donde anidan y cazan, un pantano que guarda el barro en el fondo de sus aguas. Las garzas son blancas, hermosas y carnívoras. Su vuelo es ágil y elegante; ave zancuda, de pico largo, cuello alargado y flexible. Alrededor de la ciénega tejen sus nidos. Camila Villegas teje su historia con un texto onírico.

El relato es con tres personajes: una joven pareja y su hermosa hija. La niña juega e imagina que vuela como una garza; los paseos continuos al campo y a la ciénega “la suben a las nubes”, las aves abren sus alas para volar, ella abre su imaginación. La escena se llena con sonidos campestres, con música y canciones. Detrás de esta felicidad, está la realidad que vivimos en este México lleno de contrastes.

Para la madre es inseguro mandar a su hija a la escuela, prefiere mantenerla encerrada en su casa. En el pantano está la escultura de un hombre que da la espalda al público, representa al hermano desaparecido –a muchos hombres desaparecidos en este país-, el tío al que su hija busca, le habla y desea ver nuevamente. La belleza natural del sitio, disiente con el ambiente de incertidumbre que la rodea.

Con sensibilidad la autora percibe lo hermoso que es vivir en la provincia, su texto llena el paisaje de garzas, flamencos y lagos. Así mismo le atraviesa el alma la situación actual de intolerancia, violencia e inseguridad que se vivimos en estos tiempos -40 millones de pobres, 5 millones de niños no van a escuela, niñas vendidas como mercancía sexual, etc.-, y el daño que le hemos causado al medio ambiente. En esta obra Villegas rescata de la mierda en que está convertido este país, el lado poético y lírico.

La ciénega de las garzas, cuenta con la dirección de Alberto Lomnitz, quien trabajó con la autora en 2014 con la obra Jacinto y Nicolasa, el éxito logrado los reúne ahora con esta nueva propuesta; Lomnitz conoce su dramaturgia y traslada al escenario la índole de la obra; en mi opinión el inicio es flojo, sube de intensidad durante el desarrollo y cierra con fuerza. La afinidad dramaturga-director se muestra sobre el escenario.

Las actuaciones son de Teté Espinoza, Harif Ovalle y Majo Vallejo / Valentina Rivera. Teté y Harif, demuestran versatilidad, él con la guitarra, ella con su voz; conocen y saben el manejo de los títeres –de varilla y de guante-. Las marionetas (garzas y flamencos) se convierten en personajes dentro de la trama. Toman su función en la dramaturgia.

Buenas las actuaciones, niveladas, están en el mismo plano. A Majo Vallejo le toco presentarse en el estreno, se le vio suelta, cómoda y alegre en el escenario –gracias a la labor que realiza Paloma Arredondo con el entrenamiento actoral de las niñas. Una pequeña con un futuro prometedor en el teatro. Habrá que ver a Valentina, que seguramente será una buena intérprete. El vestuario es diseño de Estela Fagoaga.

La obra se presenta en el Teatro La Capilla, Col. Del Carmen Coyoacán todos los miércoles del 4 de mayo al 20 de julio, consulta precios y horarios de la obra aquí.

No dejes de recibir en tu correo, Facebook o Twitter toda la información y los estrenos de las obras de teatro de la Ciudad de México.

Quizá esto te interese:



Deja aquí tu comentario


Tu dirección de correo electrónico no será publicada y no se te enviará nunca correo alguno, al menos que así expresamente lo solicites. El correo tiene fines de registro. Los campos necesarios están marcados *, el campo Web es totalmente opcional y puedes poner ahí la diección o tu página en Twitter, por ejemplo.







Boletín teatral

( Recibe cada semana en tu correo
la mejor información y
las obras de teatro de estreno )


DA CLICK AQUÍ




BANNER4_ALT