Por Itai Cruz/ Un día como hoy (17 de octubre), pero de 1915, nació el escritor, guionista y dramaturgo estadounidense Arthur Miller, quien se hizo famoso tanto en la Unión Americana como el resto del mundo, gracias a su amplia producción literaria, donde pudo reflejar las frustraciones y desengaños de la sociedad estadounidense, un tema del cual nadie se había atrevido a hablar en público hasta entonces.
Arthur Asher Miller nació en Nueva York el 17 de octubre de 1915, fue el tercer hijo de un matrimonio de emigrantes austríacos formado por Isidore Miller (un fabricante de abrigos judío que se arruinó durante la Gran Depresión) y Augusta Bernett. Se graduó en la Abraham Lincoln High School y para pagarse los estudios de periodismo, que cursó en la Universidad de Michigan, trabajó en una radio local, en un almacén y como editor de noche en el Michigan Daily.
Poco antes de obtener la licenciatura, escribió Todavía crece la hierba (1938), una comedia que le valdría los primeros reconocimientos. Tras finalizar sus estudios, regresó a Nueva York y comenzó a escribir seriales radiofónicos.
En 1940 contrajo matrimonio ccon Mary Grace Slattery, con la que tuvo un hijo, Robert, y una hija, Jane. Ese mismo año, debutó en Broadway con El hombre que tuvo toda la suerte del mundo, una comedia de escaso éxito comercial, pero que le proporcionó el Theatre Guild Award en 1944.
Influenciado por Ibsen, Miller mostró su preocupación por la sociedad que le rodeaba y su problemática en Todos eran mis hijos (1947), donde abordó la actividad de los que se aprovechan de la guerra. La obra obtuvo el premio de la Crítica de Nueva York en 1948 e inscribió al autor dentro del realismo norteamericano de su tiempo y supuso su espaldarazo definitivo.
Dos años después llegaría su mayor triunfo con una denuncia del carácter ilusorio del sueño americano, La muerte de un viajante (1949), obra por la que obtuvo el Pulitzer de Teatro y, de nuevo, el premio de la Crítica de Nueva York. El montaje fue dirigido por Elia Kazan y obtuvo seis premios Tony. Desde el 10 de febrero de 1949 hasta el 18 de noviembre de 1950, la obra se representó ininterrumpidamente, para luego dar paso a su esteno en salas de todo el mundo. En 1985 fue llevada al cine por Volker Schlöndorff, con Dustin Hoffman en el papel protagónico.
En 1953 escribió Las brujas de Salem, un alegato contra la intolerancia y el puritanismo ambientado en 1692, en donde hacía una denuncia contra las investigaciones que desde 1946 llevaba a cabo el denominado Comité de Actividades Antiamericanas. Por lo que Miller tuvo que comparecer ante el comité, que lo condenó por desacato al no querer delatar a los miembros de un círculo literario sospechosos de actividades procomunistas. Sin embargo, Miller apeló la sentencia y finalmente fue absuelto.
La vida de Arthur Miller cambió radicalmente cuando, tras divorciarse de Mary, el 29 de junio de 1956 contrajo matrimonio con la mítica actriz Marilyn Monroe. La boda coincidió con el estreno de Panorama desde el puente (1955), pieza en la que el autor reproducía el tema de la llegada de inmigrantes a Estados Unidos, y por la que obtendría el segundo Pulitzer. No obstante, la pareja no fue feliz, el matrimonio duró sólo 5 años y finalmente las infidelidades de la actriz, acabaron con el matrimonio en enero de 1961. En esos años, Miller se mantuvo alejado de los escenarios.
Más tarde conocería a la fotógrafa austríaca, Inge Morath, pionera del fotoperiodismo, se casaron en 1962 y ya no se separarían hasta el fallecimiento de Inge, cuarenta años después (2002). Miller y Morath tuvieron una hija, Rebecca y un hijo, Daniel.
Miller volvió a los escenarios en 1964 con Después de la caída, un texto autobiográfico en el que narraba su relación con Marilyn. En 1997, tras un largo silencio, escribió Una mujer normal, novela corta en la línea psicologista de sus últimas obras, que mereció excelentes críticas.
Fue elegido como el mejor dramaturgo del siglo XX, según una encuesta convocada por el Royal National Theatre, en la que participaron ochocientas personas directamente relacionadas con el teatro. Además recibió la Medalla de Oro de las Artes y las Letras (1959), el premio Angloamericano de teatro (1966) y el Lawrence Olivier Theatre Award (1995).
En 2004 enfermo de cáncer, neumonía y con problemas cardíacos, estrenó su última obra, Finishing the Picture. Arthur Miller falleció en su rancho de Roxbury el 10 de febrero de 2005, su nombre fue sinónimo de audacia y de ruptura, tanto temática como estructural.
