Por Gina Fierro/ “Estoy muy agradecido con mis padres, con la naturaleza y Dios, porque me han permitido ser un actor que puede ir de la tragedia a la farsa, pasando por todos los géneros intermedios, de manera que al público le ha gustado mi trabajo”, dijo en entrevista con Cartelera de Teatro, Patricio Castillo, quien forma parte del elenco del musical La jaula de las locas, próximo a estrenarse el 23 de noviembre en el Teatro Hidalgo.
De Escorial a La jaula de las locas
Juntos en La Fierecilla Tomada
“El trabajo en conjunto con los protagonistas, Roberto y Mario Iván, ha sido maravilloso, estoy más que contento. Con Roberto acabamos de terminar recientemente La Fierecilla Tomada donde compartimos escenario, la primera vez que trabajé con él fue en 12 hombres en pugna, un montaje con gran éxito, dirigida por el maestro Solé. Roberto es un extraordinario actor y muy buen cantante, que junto con Mario Iván, te quedas maravillado al ver lo que son capaces de hacer, actuar, bailar y cantar”.
“La gente va a brincar en la butaca”
“Cómo cantan, cómo bailan todos”, expresó Patricio con asombro. “Cuando el público vea el cáncan, la gente va a brincar en la butaca, eso lo
aseguro. Quienes no vieron la puesta en escena en el Teatro Silvia Pinal, cuando éste todavía existía, tendrán la oportunidad de verla ahora. Hay muchas personas que han visto la película, ya sea la europea o la norteamericana, y han estado muertos de risa, hasta las lágrimas. Este próximo estreno va a ser maravilloso para que el público de la Ciudad de México tenga nuevamente una oportunidad de ver La jaula de las locas en teatro y con un reparto fantástico”.
El diputado Dindon
“Este papel me gusta, creo que lo puedo interpretar con cierta propiedad, he hecho papeles de gente muy seria, que bueno, en la obra finalmente no resulta tan seria, pero bueno, no me quiero adelantar a la historia”.
En esta ocasión, Patricio interpreta al diputado Dindon, un hombre muy conservador que no le gustaría saber que la familia del su prometido de su hija es homosexual. “Me siento muy bien con el personaje, me siento arropado, tengo la responsabilidad de venir a confrontar la idea principal de la obra, aquí soy el antagónico y tengo que ser muy fuerte en esa representación que va en contra”.