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La Máquina de Teatro, compañía que tienen a su cargo Clarissa Malheiros y Juliana Faesler, celebrará sus 19 años de trayectoria con una residencia artística en el Museo Universitario del Chopo, y consistirá en cuatro estrenos, un remontaje, un seminario y dos talleres.

Esta compañía se ha consolidado como una de las más importantes en el ambito escénico de nuestro país, caracterizándose por tener un estilo propio, que ha sido enriquecido a través de la experimentación con diversos lenguajes artísticos.

De acuerdo con Juliana Faesler, la Máquina de Teatro ha tenido que ganarse su lugar en un mundo escénico que ha dado preferencia al sexo masculino. “Cumplir 19 años nos parece muy importante porque es una compañía dirigida por mujeres, porque ha sobrevivido pese a que nuestro teatro es de resistencia y porque siempre ha tomado en cuenta la historia contemporánea de México […] Se nos ha cuestionado por ser mujeres, pero la gente nos ha reconocido. La lucha de las mujeres debe de continuar, se lo debemos a las que nos anteceden”.

Las puestas teatrales que presentarán tratan temas distintos, planteando interrogantes como cuál es la relación entre lo místico y lo racional, o si todos somos responsables de lo que sucede a nuestro alrededor.

En cuanto a las actividades académicas, éstas se enfocan en la reflexión sobre el papel que ejerce el arte en la sociedad y su contexto, y en la relación creador/espectador. El programa incluye el Taller de montaje Guerra en el paraíso de Carlos Montemayor, que se imparte desde el día de ayer y hasta el 25 de marzo; el Laboratorio de composición y estrategia coreográfica, del 23 al 27 de marzo; y el Seminario Ejercicios artísticos ante la situación política, que tendrá lugar el 6, 12, 19 y 26 de marzo.

“El teatro de este momento le exige al espectador que se comprometa, por eso nos interesa mucho el contacto que tendremos con el público a través de los talleres”, señaló Faesler.

Con respecto al laboratorio interdisciplinario “Unidad habitacional”, el proyecto reflexionará sobre “la urbe de mil caras”. “[…] vamos a hablar sobre lo que nos pasa a los que vivimos en la ciudad de México, participarán jóvenes danzantes”, apuntó la directora.

En lo relativo a los montajes, el performance Zapata. Muerte sin fin, aborda a la figura revolucionaria y es interpretado por artistas de Guadalajara, Mérida, Oaxaca y la Ciudad de México, el cual será presentado del 19 al 22 de marzo.

También se presentarán las puestas Tríptico I /Pessoa. La hora del diablo, que es la primera parte de un tríptico filosófico que reflexiona sobre el alma, el bien y el mal; El Inspector V. 01 Los impecables, que habla sobre cómo afectan las acciones de una persona a otra; y Todas las cosas que están mal, la cual muestra cómo evoluciona el ser humano desde la inteligencia y el sentido del humor.

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