Por Óscar Ramírez Maldonado / Como si no fuera suficiente el tener que lidiar con el fantasma vengativo de su padre, con el glotón cachondo de su tío (convertido ahora en rey y marido de su madre) y con las locuras de Ofelia, el pobre Hamlet tiene otra cosa en qué pensar y que lo “mortifica”. Y es que según Benedict Cumberbatch, quien actualmente da vida al personaje shakesperiano en un montaje en el teatro Barbican de Londres, resulta “poco placentero” que mientras se está actuando sobre el escenario ver una “luz roja” de alguien que está grabando con su smartphone desde el público.
El actor, que en televisión interpreta la serie Sherlock y que estuvo nominado en la pasada entrega de los premios Oscar por The Imitation Game, pidió al salir del teatro a los admiradores que lo aguardaban “hacer buen uso” de la tecnología, para luego advertir que al próximo que grabe en la sala será expulsado de la función.
Esto sucedió después de una difícil función el sábado pasado, la cual se vio interrumpida en dos ocasiones debido a problemas técnicos. La gente grabando, explicó Cumberbatch, hizo que la reanudación del espectáculo resultara más difícil para los actores. Y es que solamente Yorick podría mantener el rostro impasible con distractores como estos. A esto sumen el nerviosismo de lo que calificó el interprete como “una semana movida” en la que levantó el telón el montaje, recibiendo el actor en su debut críticas encontradas.
Con sus declaraciones el actor británico pone nuevamente sobre la mesa el tema del uso de los dispositivos móviles durante una función de teatro. En México conocemos bien lo molesto que resulta, para actores y para espectadores, cuando alguien se pone a revisar su teléfono celular y con la pantalla distrae al resto de la audiencia, o peor aún, el que en plena función atiende -con tono musical y llamativo de por medio- una llamada y piensa que por hablar bajito nadie lo nota..
Aquí compartimos con ustedes el momento en el que Cumberbatch hace su petición al público.
