El día de ayer se anunció el regreso de Más pequeños que el Guggenheim a escenarios mexicanos después de haber tenido una exitosa temporada el año pasado e iniciado este año con una gira por Perú y España, especialmente por el país Vasco.
Con la presencia de Austin Morgan, Adrián Vázquez, Hamlet Ramírez y Miguel Corral, intérpretes del montaje, su autor Alejandro Ricaño y Joseph Hemsani, uno de sus productores, se realizó un encuentro con los medios de comunicación después de presentar algunas escenas de esta obra que en el 2008 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia Emilio Carballido.
Más pequeños que el Guggenheim es una obra que lleva aproximadamente tres años y fue escrita en parte con un beca de la fundación Antonio Gala en España y otra del Instituto Veracruzano para la Cultura y las Artes. En este sentido, su autor explicó que la obra se ha presentado en una serie de festivales en en México y en el extranjero, además de haber tenido una primera temporada en el Centro Cultural del Bosque para después presentarse en el Foro Shakespeare.
Respecto a la llegada del montaje al escenario del Teatro Helénico, Ricaño señaló que se trata de “un lugar idóneo para la obra, porque precisamente creemos que está ya a medio camino entre el circuito comercial y el circuito cultural, es decir, creemos que es una obra muy accesible, no únicamente para el público de autoconsumo”. En este sentido consideró que Más pequeños puede llegar a un público acostumbrado a un teatro más comercial, pero sin perder su contenido cultural.
Al hablar sobre el tema de este montaje, el dramaturgo señaló que no se trata de una obra sobre el teatro o sobre actores, es una comedia sobre la amistad y la pérdida. Es, agregó, una obra sobre la búsqueda de uno mismo y “la necesidad de mantener intacta la esperanza siempre”. Es un tema, dijo, que a todo le mundo le llega, “uno cumple cierta edad y se da cuenta que la vida no es como uno la imaginaba”. Según el autor, esta obra no tiene como objetivo simplemente hacer reír, pues lo que es “inevitable es la historia de fondo, que es la que duele”. Al respecto, comentó que la risa sirve para desarmar al público y contarle una historia que no quiere escuchar, “si uno va al teatro y no se conmueve no tuvo ningún sentido ir al teatro”.
En este sentido, consideró que el éxito del montaje se ha debido en primer lugar a sus actores y después a la sencillez del texto y la honestidad de todo el equipo que en él participa.
Por su parte, Miguel Corral consideró que la obra habla de una condición muy humana y sobre la amistad, lo que hace que identificarse con estos personajes sea muy fácil para el público, “creo que todos en algún momento nos hemos sentido insignificantes ante la magnitud de los sueños que hemos imaginado”.
Respecto a la gira que la puesta en escena realizó por España y Perú, Adrián Vázquez y Austin Morgan señalaron que obtuvo muy buena respuesta. Después de adaptar algunos detalles que el público de estos países no entendía el recibimiento por parte de auditorios muy distintos y de diversas edades fue muy bueno, explicaron. Incluso en Perú los están invitando nuevamente para que regresen, según señalaron.
Durante la conferencia de prensa también se habló sobre el teatro mexicano, y ante la pregunta expresa de cómo reconstruir la fe en él, Alejandro Ricaño consideró que es labor de los directores, pues tienen que confiar más en los dramaturgos mexicanos y a las instituciones les toca dar más apoyo a los textos escritos por dramaturgos del país. Es, dijo, un trabajo en el que se deben complementar varios discursos, “hay que creer en las historias que tenemos que contar los escritores mexicanos”. Otro punto necesario, es que el teatro en nuestro país viva un poco menos de las instituciones y comience a creer que se puede vivir del público que desea historias interesantes. En este sentido, reconoció la labor de los productores del montaje, pues se trata de un grupo de productores que se está arriesgando y apuesta por algo fresco.
Más pequeños que el Guggenheim se estará presentando todos los martes del 14 de mayo al 30 de julio a las 20:30 horas en el Teatro Helénico. Haciendo click aquí pueden conocer toda la información de la obra (dirección, boletos, etcétera).
