Cuando Bianca Marroquín se sube al escenario uno puede disfrutar de una de las actrices de teatro musical más talentosas y populares en México y el mundo. Tras terminar su temporada en Mary Poppins, la actriz ha vuelto a iluminar el escenario en la puesta Chicago como la femme fatale Roxie Hart. Este montaje de Broadway, con Marroquín de vuelta, celebró el pasado 24 de septiembre 7 mil representaciones.
La actriz de electrizante personalidad no sólo representa a los mexicanos, sino a los latinos en general, además de cautivar a las audiencias que la han visto e inspirar a quienes quieran seguir sus pasos.
Quizá uno de los valores más importantes de su presencia en el teatro de Broadway, además de abrir las puertas para otros hispanos, es que la actriz ha logrado romper los estereotipos, como lo hizo en su momento el fallecido actor Anthony Quinn, quien a pesar de su fuerte acento en inglés, nunca actuó de mozo, jardinero o lavaplatos.
La actriz regiomontana, criada entre Matamoros y Texas, comenzó su carrera con el musical La Bella y la Bestia, seguida por Rent y El Fantasma de la Ópera. Por su rol en Chicago recibió múltiples reconocimientos de la Asociación de Críticos de México, incluidos mejor actriz y revelación.
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