Por Redacción/ En el marco del Día Mundial del Teatro, el lunes 27 de marzo se rendirá un homenaje a José Solé (Ciudad de México, 28 de julio de 1929-15 de febrero de 2017). Así anunció María Cristina García Cepeda, secretaria de Cultura, durante el velorio del director de escena, productor y actor, donde estuvo acompañada por Lidia Camacho, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes.

“El maestro José Solé deja un gran vacío en los escenarios teatrales de nuestro país, y creo que se merece un homenaje de estas dimensiones por todo lo que hizo y dio para el teatro en nuestro país, y para que la comunidad teatral y el público puedan rendir homenaje a un hombre que fue el teatro mismo”, dijo la secretaria de Cultura.

Agregó que José Solé fue un hombre que amó y vivió el teatro con pasión. “Su casa fue el Instituto Nacional de Bellas Artes. Fue un hombre muy querido, de una gran generosidad, sensibilidad y sentido del humor; un hombre que vamos a extrañar y que nos ha dejado un legado muy importante, pero sobre todo un hombre que pudo conciliar las diferentes facetas del teatro; una gran figura del teatro nacional”.

Familiares, amigos y personalidades del gremio externaron sus condolencias por la pérdida de esta gran figura del mundo del teatro mexicano, dueño de una trayectoria artística de más de 60 años. “Mi papi lindo era un hombre bueno. Decía que su gran amor era el teatro y las mujeres. Era un gran creador, un buen comedor; le gustaba el arte, la música, y le gustaba mucho la vida. Tenía muchos planes y murió contento”, dijo su hija Mina Solé.

Cristina Gálvez, exesposa del maestro, señaló que en el campo humano le dejó dos hijos maravillosos: María y José. “Estuvimos casados 20 años y fue un hombre fantástico, lleno de talento, humor y un gran corazón, además de su capacidad de trabajo y su trayectoria. Era una persona con una gran nobleza; un gran ser humano, y creo que deja una gran huella”.

El director de la Compañía Nacional de Teatro, Enrique Singer, comentó que José Solé era una persona muy cálida y cercana. “Era un cómplice con un sentido del humor muy fino. Es una perdida profesional. Se va uno de los más grandes maestros de la segunda mitad del siglo XX; un hombre con un conocimiento teatral muy profundo.

“Nos enseñó algo fundamental: la pasión y la entrega al trabajo. Era un hombre que igual hacía el vestuario o la escenografía. Trabajaba todo el día en varias puestas en escena. Hizo teatro, ópera y ballet. En el teatro es un ejemplo para todos y se queda como una marca indeleble en nuestra historia”, refirió Singer.

La actriz Luisa Huertas recordó que conoció al maestro Solé desde que ella tenía 16 años de edad. “Me deja el recuerdo de un hombre de teatro en toda la extensión de la palabra. Fue un hombre con una alegría enorme de vivir; uno de los mejores amigos de mi marido, Miguel Córcega. Para recordarlo hay que seguir haciendo teatro y celebrar la intensidad de vida que tuvo”.

Por su parte, el actor Arturo Beristáin indicó que a José Solé lo quiso como a un padre. “Compartimos muchas cosas. Su principal virtud como director fue el profundo respeto y cariño por los actores. Era un placer y diversión trabajar juntos. Fue el gran director de la tragedia en México y era una ser extraordinario, generoso y siempre pendiente”.

El actor Rodrigo Murray indicó que| tuvo la oportunidad de trabajar con el maestro Solé en la obra Doce hombres en pugna. “Tuve mucha relación con él porque muchas veces fui su asistente de dirección, y con él aprendí mucho. Su mayor enseñanza fue el sentido del humor. Era muy divertido y hacía burla de su propio mal. Sería importante recordarlo en todas sus facetas: como director, actor y amigo”.

En los teatros pertenecientes al Instituto Nacional de Bellas Artes se colocará un moño negro y una semblanza del destacado exponente del teatro mexicano.

No dejes de recibir en tu correo, Facebook o Twitter toda la información y los estrenos de las obras de teatro de la Ciudad de México.