Por Redacción/ El director de la compañía teatral Circo de los Horrores, Jesús César Silva, y los hermanos Manuel y Rafael González, a cargo de la producción, anunciaron este miércoles que suspenderán su gira en México y saldrán definitivamente del país, tras el impedimento que han tenido para presentarse en diversos foros.
Mediante una video-conferencia desde España, Manuel González dijo que lamentaba dar la noticia de que la gira se cerrará pese a los muchos esfuerzos por mantenerse firmes y continuar con más presentaciones, por lo que la última función se ofrecerá el 11 de diciembre en Guadalajara, Jalisco.
“No se nos ha corrido directamente, pero se sobreentiende que si no nos dejan montar el espectáculo por múltiples pretextos es porque no somos bienvenidos”, declaró. Recordó que el año pasado obtuvieron gran éxito en la Ciudad de México y Guadalajara, donde asistieron cerca de 110 mil personas a las presentaciones, y ante la buena respuesta duplicaron el esfuerzo este año y aunque en un primer momento tuvieron gran aceptación, las cosas comenzaron a complicarse en la ciudad de Monterrey, Nuevo León.
Tanto Manuel, como su hermano Rafael, y el director, intentaron mantenerse firmes y continuar con las funciones, pero al final no son capaces de comprender qué pasó en México, o qué hicieron mal. “Todo parece indicar que un sacerdote de Monterrey inició una campaña de desprestigio, de falsedades vertidas sobre la compañía del Circo de los Horrores y sus presentaciones, y esos comentarios negativos llegaron profundamente a la administración y parte de la sociedad”, señaló Manuel González.
Subrayó que la compañía se ha presentado en varias partes del mundo sin mermar su libertad de expresión. “Hemos estado incluso en Roma, la cuna de la Iglesia, y nunca habíamos tenido este problema. Entendimos que en la parte del norte del país no tuvimos cabida, pero luego fue Querétaro y después otras ciudades”.
“Esto hace que nos rindamos y no somos fáciles de doblegar, pero lo han conseguido, y el Circo de los Horrores, el origen, la compañía ya se fue y lamentamos anunciar que el 11 de diciembre en Guadalajara será la última función en México, lo hacemos con mucha tristeza”, dijo.
Agregó que ante el espíritu revolucionario que los caracteriza no quieren irse sin dar batalla, por lo que han abierto a la venta más de 30 mil entradas con la promoción de dos por uno, para quienes deseen ver su espectáculo y sea el público quien lo juzgue. También responsabilizó al iniciador de la campaña de desprestigio, no sólo de que el público mexicano se prive de ver su “show”, sino de que se vayan a la calle 120 personas, sin trabajo, al tener que cerrar dos compañías que funcionaban bien.
“No se trata de que un líder de la comunidad católica salga a la palestra para defendernos, eso le toca juzgarlo al público, no queremos hacer una cruzada, sólo estamos explicando por qué no nos dejan trabajar”, añadió.
Por su parte, Jesús César Silva expresó que se sienten profundamente afectados. “Creo que no hay derecho de que jueguen con su libertad de expresión y de elección, cada quien debe elegir qué quiere ver o no. No es posible que alguien que no ha visto el espectáculo opine de esa forma tan denigrante de nosotros. Estoy fastidiado, dolido y triste”.
Explicó que la trilogía presentada por el Circo de los Horrores se basa en los iconos del mundo del terror, sin ninguna malicia, historia satánica, misa rara, o falta de respeto. “Irónicamente yo mismo soy católico, sobrino del padre jesuita Silva, y él me ayudaba a escribir algunas historias. Lo único que puedo decir es que nos vamos jodidos, pero también amenazo con volver, y vamos a continuar, porque tenemos abiertas las puertas en todo el mundo”.
Informó que no piensan en regresar el próximo año, ni a corto plazo, han tenido pérdidas, emocionales principalmente, y tal vez más adelante reconsideren la posibilidad de presentarse en México. “Tampoco cambiaré el formato de la trilogía para poder ofrecer el espectáculo aquí, y al mismo tiempo desmiento aquellos señalamientos de que no podíamos presentarnos por falta de documentación, lo que hay es una gran manipulación”.
En su momento, Rafael González manifestó que se lleva grandes amistades de México, quienes apoyaron a la compañía y, al igual que sus compañeros, lamentó el tener que irse. “Invito a quienes no nos han visto y a quienes nos acusen a que vengan a ver el espectáculo, y ellos mismos juzguen”.
La compañía actualmente tiene funciones en el Gran Teatro Moliére, de la Ciudad de México, donde ofrecerá la última el 3 de diciembre próximo, para después viajar a Guadalajara.
Con información de Notimex.
