El día de ayer se realizó la función para medios de comunicación de Afterplay, secuelas chejovianas, que iniciará temporada el jueves 16 de agosto en el Teatro Santa Catarina, en Coyoacán. Este montaje, dirigido por Ignacio Escárcega, está integrado por un par de adaptaciones o variaciones sobre temas de Chéjov, escritos por el dramaturgo irlandés Brian Friel. Afterplay y El oso son la piezas que forman esta puesta en escena que cuenta con las excelentes actuaciones de Mónica Dionne, Rodolfo Arias y Marcial Salinas, además de la interpretación en vivo de la violinista Martha Moreyra.
Según explicó su director, Ignacio Escárcega, los textos que integran el montaje fueron elaborados como un homenaje al autor ruso, tomando y recreando a sus personajes. En cierto sentido, explicó, estas variaciones nos hablan de la manera en que nos relacionamos con la pérdida y la forma en que la manejamos. Sobre la importancia de Chéjov, señaló que es quien “descubre” el subtexto y la importancia de lo que no se dice, pues “cambió la señal de toda la dramaturgia del siglo XX al poner, por ejemplo, la acotación ‘pausa’, suponer que en el desarrollo de la acción dramática hay un momento en el que pesa más el silencio que la palabra”.
El teatro de este escritor ruso, señala el director, nos muestra esas “vasijas” en donde el ser humano deposita sus lados ocultos. “Para mí -dijo Escárcega- lo maravilloso del teatro de Chéjov es que con pautas sutiles nos deja ver esas vasijas de lo oculto, a través de las contradicciones de los personajes, del fondo de las cosas que están diciendo. Esa yo creo que es su gran aportación como dramaturgo y es justo la que recrea Friel”.
Con siete semanas de preparación de este montaje con los actores, el objetivo que se busca, según señaló en conferencia de prensa Mónica Dionne, es “conmover, divertir y entretener” a los espectadores. En este sentido, Rodolfo Arias comentó que la expectativa es “lo que generalmente buscamos en puestas en escenta con contenidos de este tipo, UNAM, Bellas Artes o teatro alternativo, experimental, dejarle a la gente lecturas de conflictos que tal vez todos vivimos, lecturas distintas” y con ellos se lleven una posibilidad diferente de ver su propia realidad a través de la identificación. Por su parte, Ignacio Escárcega agregó que esta propuesta busca apuesta por anclar la expresión emocional en la palabra.
Friel utiliza para Afterplay -la primera pieza de este montaje- a los personajes de El tío Vania y de Tres hermanas, dando “curso al nudo dramático” de estas piezas y contándonos lo que podría haber sucedido después del final que Chéjov planteó. Por su parte, en El oso, el autor irlandés se apega a la anécdota original escrita por el dramaturgo ruso, pero dotándola de gran vitalidad y dinámica. La escenografía realizada por Teresa Alvarado y Anabel Altamiranode para ambas escenas, se inspira en el constructivismo ruso, buscando utilizar diferentes puntos de vista y acentuar la perspectiva.
Aferplay, secuelas chejovianas se estará presentando hasta el 7 de octubre en este teatro de la Universidad Nacional Autónoma de México ubicado en Coyoacán. Haciendo click aquí pueden consultar más información de la obra (dirección, horarios, boletos, etc.).
